Los médicos han descubierto para quiénes las sandías jugosas, cuya temporada acaba de comenzar en España, están contraindicadas. Comer sandías puede agravar algunas enfermedades y empeorar la condición del cuerpo.
Quién no debe comer sandías, cuántos gramos de sandía se puede consumir al día y cuál es el beneficio de la fruta: todo esto en nuestro artículo.
Según los médicos, con las sandías se debe tener cuidado. En primer lugar, los diabéticos, así como las personas que sufren de hinchazón.
“No les irá bien a aquellos que sufren de hinchazón. Es que se acumula el líquido en el cuerpo, y si se come la sandía, es más líquido”, dicen los médicos.
¿En qué otras condiciones y enfermedades no se debe comer sandía?
trastornos del flujo de orina;
urolitiasis – el efecto diurético de la sandía puede causar piedras y ataques;
colitis, diarrea, otras exacerbaciones de enfermedades gastrointestinales;
enfermedades pancreáticas en fase aguda;
enfermedades del corazón que se acompañan de retención de líquidos en el cuerpo;
adenoma de próstata;
procesos de adherencia postoperatoria.
Cuánta sandía se puede comer en un día
Para las personas sanas, la sandía les va muy bien, ya que contiene sustancias que inhiben la formación de piedras y tienen un efecto tonificante en el cuerpo.
Sin embargo, los médicos aconsejan limitar el consumo de la fruta. La cantidad diaria máxima para una persona con riñones sanos es de un kilogramo, y para un niño, es tres veces menos. Si siente que es demasiado “diurético”, hay que reducir la dosis.
Para no causar problemas gastrointestinales, los médicos aconsejan no comer sandía antes de las comidas o inmediatamente después. Es mejor consumirla como una comida individual 2 horas antes o después de la comida principal.
¿Cuál es su beneficio?
La sandía, a pesar del sabor dulce, es baja en calorías: solo 38 kcal/100 gramos. El hecho es que consiste en agua en 92-93%. Pero el resto son sustancias muy útiles:
La vitamina A es un antioxidante importante que es bueno para la visión;
Las vitaminas B1 y B6 participan en los procesos metabólicos;
normalizan funciones del sistema nervioso;
La vitamina E es otro antioxidante fuerte que es importante para la función reproductiva;
La Vitamina B9, que es ácido fólico, es útil para las funciones cognitivas;
La vitamina C es un antioxidante que fortalece las paredes de los vasos sanguíneos y aumenta la inmunidad.
Antes, escribimos que los españoles investigaron el porcentaje de los nitratos contenidos en las primeras sandías, y el resultado los sorprendió mucho.
